Cualquier trozo de alambre común cambia ligeramente de resistencia cuando se somete a tensión. Los cables dispuestos para maximizar este efecto forman una galga extensométrica. Las galgas extensométricas suelen ser patrones de láminas grabadas pegadas a una barra de metal u otro material tensable.
En una célula de carga, las galgas extensométricas se colocan de forma que, cuando se carga la célula, las galgas se deforman, cambiando su resistencia. El cambio de resistencia por unidad de tensión es muy pequeño. Para medir estos pequeños cambios de resistencia o tensión, estos sensores se utilizan casi siempre en una configuración de puente con una fuente de excitación de tensión. El puente de Wheatstone general consta de cuatro brazos resistivos con una tensión de excitación que se aplica a través del puente.
Existen diferentes configuraciones:
– sensor de puente de un punto (una sola resistencia cambia, mientras que las otras tres son fijas);
– sensor de puente de dos puntos;
– sensor de puente de cuatro puntos (los cuatro elementos varían).
La última, también llamada «configuración de puente completo» es el tipo de puente utilizado en los instrumentos SISGEO porque se necesita una salida muy lineal y sensible.
Cuando el instrumento se conecta con un cable largo (>50mt) es necesario reducir los errores derivados de las caídas de tensión en la línea de excitación, por lo que es necesario conectar 6 hilos al lector/registrador de datos utilizando 2 entradas analógicas, una para medir la tensión de salida y otra para medir la tensión de excitación. La caída de tensión se divide entonces por la tensión de excitación para hallar la relación entre ambas.